La regulación de las operaciones con criptomonedas en América Latina es popular desde hace tiempo. Hace tres años, el informe de la Tesorería del Estado mostró un aumento de este tipo de transacciones en la cantidad de 510%. El crecimiento más impresionante se registró en 2016 – $ 50 mil millones.
La perspectiva del desarrollo de los negocios con dinero digital está relacionada principalmente con la inestabilidad de la situación política y económica en muchos países. Para los principales expertos, este indicador parecía cuestionable, porque la crisis a menudo detiene el desarrollo de la innovación, los negocios, etc. En América Latina, el número de usuarios de Internet es menor que en otros países desarrollados, pero casi todos ellos practican con éxito los gastos electrónicos.
El desarrollo de la criptomoneda utilizó las populares redes sociales Facebook, Twitter y WhatsApp. Argentina y Brasil establecieron récords de visitas a las redes sociales. En los últimos tres años, los latinoamericanos han demostrado su deseo de libertad, tecnologías web y pagos electrónicos.
El interés sobre Bitcoin surgió debido a la posición firme del Presidente de Argentina, Mauricio Macri, que se interesó en el desarrollo de una nueva dirección financiera, y teniendo el cargo de una medida de Buenos Aires, y celebró el primer Bitcoin-Forum en América Latina. Después de Makri, los políticos locales se interesaron por la criptomoneda, lo que llevó las operaciones con dinero digital a un nuevo nivel.
Proponemos examinar más detalladamente el estado del negocio de la criptodivisa en cada país de América Latina.
Venezuela es un estado que en 2016 el Fondo Monetario Internacional predijo una tasa de inflación de más del 700%, en 2017 la cifra alcanzó el 1600%. La inflación ha elevado la popularidad del Bitcoin, por lo que el número de transacciones ha aumentado.
La popular plataforma LocalBitcoins, que realiza transacciones de criptodivisas, alcanzó por primera vez la cifra de 14,2 millones de dólares. El número de usuarios del dinero electrónico en 2015 en comparación con 2014 fue de más del 100%. A pesar de tanta popularidad en Venezuela, el Bitcoin es considerado propiedad privada, y no una unidad monetaria.
Argentina es líder en el desarrollo del mercado de la moneda digital. El Banco Central informó sobre los posibles riesgos del desarrollo del mercado de criptomonedas ya en 2014. Sin embargo, en 2014, Buenos Aires declaró ser la primera ciudad en la que comenzó a operar uno de los intercambios más famosos del mundo, Bitex.la.
En 2015, llegó al poder el presidente Mauricio Macri, quien no tuvo miedo a la innovación en sus acciones. La política del Estado ayudó a estabilizar las empresas que trabajan con dinero digital. En 2016, Uber firmó un acuerdo con Xapo, que permitió pagar los servicios de taxi con Bitcoin.
La legislación de Argentina no reconoce a la criptodivisa como moneda nacional, pero eso no impide que la perciba como dinero en efectivo. Así, el Código Civil permite considerar el dinero digital como una mercancía.
Lamentablemente, no todos los países de América Latina han logrado tal avance en el desarrollo del negocio de las criptodivisas. El Servicio Federal de Impuestos de Brasil para ajustar la tributación de las transacciones con monedas digitales equipara el dinero electrónico a los activos financieros.
El Banco Central de Colombia declaró oficialmente que el dinero digital no puede ser una moneda de curso legal. En Bolivia y Ecuador, las operaciones con criptodivisas están estrictamente prohibidas por la legislación vigente. Los gobiernos de los países mencionados no están dispuestos a tomar medidas para el desarrollo del negocio de criptodivisas en el territorio de sus estados.
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